fotos: Supersónicos
La etapa del Cerro de Montevideo, siempre es linda correrla. Primero te hacen el desgaste abajo, que tampoco es el llano, porque repechos y bajadas, bajadas y repechos, y luego, cuando estas casi pronto para detenerte, ja ....se viene la subida al Cerro. Apenas doblas en la esquina de la sucursal del Brou y miras ese repecho que esta de pie, te da no se que, incluso hasta parece que está como diciéndote: dale, vení, subilo, pero de arriba no te la vas a llevar. Una cuesta que no tiene descanso, que no te da tregua, o sos tú o es él. Recién cuando llegas allá arriba y empiezas a dar la vuelta a la fortaleza, es cuando tus piernas empiezan a sentir algo de alivio. Y ahí empieza lo otro, la panorámica que hay allá arriba es espectacular y no te la querés perder, entonces tenes que tener mucho cuidado en mirar donde pisas, porque el terreno es desparejo y te podes lesionar. También tenes que bajar con el freno de mano casi permanente, porque caer en plena bajada sería muy doloroso. El público en general, los atletas, y hasta los fotógrafos también disfrutan de este paisaje. Por eso lo del principio, esta etapa de la AAU, cuando toca subir al Cerro de Montevideo, a mi entender, es una de las más lindas de correr.
Gracias ALCO, gracias AAU, gracias a todos por recibirnos y por regalarnos ese paisaje único.
Un equipo de Supersónicos como siempre, dejó la marca registrada en este barrio tan popular y sufrido.
Hasta la próxima
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