SUPERSÓNICOS EN LA SAN FERNANDO 2013

Escribe: Gerardo Basignani

En una jornada impecable para tomar sol en la playa, entre las olas de la Brava o la tranquilidad de La Mansa, con algún Crucero con turistas que llegan a nuestro país, y a pocas horas de haber estado los REYES MAGOS en cada hogar donde vive un niño, varios Supersónicos se hicieron presente en la hermosa y coqueta siempre PUNTA DEL ESTE. Algunos al mediodía optaron para la pasta y el agua sin gas, otros nos inclinamos por una buena cerveza fría para desafiar el gran calor reinante. Algo que no estaba previsto para ese día fue la presencia de una invasión de mosquitos que nos tuvo a todos a mal traer. En los locales comerciales los repelentes se habían agotado. Un amigo Halcón nos cedió lo último que quedaba de aquel pomo apretado por varios. Pero fue suficiente para por algunos minutos ponerle un parate a ese incómodo insecto. La península estaba como todo domingo de Enero, colmada de veraneantes. Los autos imposibles de avanzar. Lentamente todo iba quedando dispuesto para la largada que estaba prevista para las 21.30 hs. Sin embargo, un retraso ocasíonó más críticas a la organización y aún sin saber lo que vendría más adelante, que era la mala programación que hubo en cuanto a la hidratación para los atletas anotados. No alcanzó, como ya ha sucedido en otras competencias no organizadas por la Agrupación de Atletas del Uruguay. Verguenza ajena sentía cuando en plena carrera veía con asombro, como otros compañeros que iban a mis costados, levantaban la "bolsita" de agua de OSE del suelo, ya abiertas por otros que pasaron anteriormente, y como podían, buscaban tener algo con que hidratarse. Imposible de imaginar, que con el gran calor reinante en la primera semana de Enero, no se hagan bien los cálculos para que no ocurran cosas como estas. Temas para solucionar en el futuro. A lo largo de todo el camino y mucho más en la llegada, la gente esperaba el pasaje de los competidores para saludar a algún conocido, familiar, o simplemente apoyar el esfuerzo. Las fotos, las cámaras, la medalla y el abrazo final, señales claras que la meta estaba cumplida y ya el reloj se podía detener. Cosas para la reflexión: cuesta creer como se puede calcular de menos la hidratación, cuando por vía internet se saben exactamente cuántos competidores se anotaron y pagaron el derecho a correr. LAMENTABLE. Le caiga a quien le corresponda. Con respetos, todos podemos opinar. Gracias a Dios.
Hasta la próxima.























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